Los Desechos que Generamos

Los desechos se generan en la realización de todas las actividades humanas: en las industrias, en las actividades agrícolas, en las escuelas, en las casas, etc. Sin embargo, es en nuestras casas y nuestras escuelas en dónde se genera mayor cantidad de basura, pues disponemos todos los residuos en la misma bolsa o en el mismo bote convirtiéndose estos en basura. De ahí la necesidad de conocer cuáles son los principales residuos que generamos en nuestras casas y cómo podemos separarlos y disponerlos adecuadamente. Aún más importante es conocer cómo podemos generar menos residuos.

Cerca del 70% de los productos que compramos son empaques y envolturas. Existe todo tipo de charolas, bolsas de plástico, botes y botellas de vidrio, envases y etiquetas de papel y cartón, envases y contenedores de aluminio y metal, envases y contenedores de unicel.

En general, de toda la basura que desecha una persona, el mayor porcentaje corresponde a los restos de comida, de jardines y similares (orgánicos); en segundo lugar está el papel y cartón; después la basura formada por elementos varios, que incluye pañales desechables y hule; posteriormente la compuesta por materiales de vidrio y finalmente los plásticos, metales y textiles (Beltrán, M.M. 1999).

Para reducir la cantidad de basura que generamos debemos separar los residuos de acuerdo a sus componentes antes de tirarlos, de tal manera que podamos entregarlos a los centros de acopio de la localidad y puedan volver a ser aprovechados. Un centro de acopio es un lugar donde se depositan y almacenan adecuadamente los desechos sólidos reciclables.

Desafortunadamente, en los países en vías de desarrollo, la mayor parte de los residuos son depositados como basura y, en el mejor de los casos, en los camiones del servicio de limpia para ser trasladados a su destino final que muchas veces son tiraderos incontrolados al aire libre que atraen moscas, ratas y otros animales transmisores de enfermedades.

La basura acumulada en tiraderos abiertos proporciona un pésimo aspecto a las comunidades; produce un olor muy desagradable debido a la putrefacción de los desechos y además, contamina el aire por las sustancias que se desprenden de ella y el agua por los materiales que son acarreados por la lluvia hasta los ríos u otros cuerpos de agua.

De igual forma, la basura orgánica e inorgánica que se quema o incinera sin control, afecta las condiciones del aire por la adición de otros gases tales como el monóxido de carbono, dióxido de carbono, ácido clorhídrico y ácido cianhídrico, entre otros. Además, el polvo, humo, partículas, sustancias químicas y productos de combustión, alteran los componentes naturales de la atmósfera y aumentan la temperatura ambiental, lo que ocasiona graves daños a los ecosistemas.

Publicado por: Carlos Cobos Aroca